Historia de vida: Duck Hee Lee, el tenista que es sordo
























Duck Hee Lee es un tenista surcoreano de 17 años, como cualquier otro joven que compite en el circuito junior, que empieza a dar sus primeros pasos por la ATP jugando Futures y algún que otro Challenger, pero también es un jugador con una historia de superación propia y esfuerzo continuo: es sordo.

Lee nació el 29 de mayo de 1998 en Jaechon City, Chungcheongbukdo, Corea del Sur. Con apenas 14 años, se convirtió en el jugador más joven de la historia en conseguir un punto para el ranking ATP en el Future de Tsubaka, Japón luego de vencer al jugador profesional Masatoshi Miyazaki por 6-1 y 6-3.

Actualmente ocupa el puesto número 290 del ranking ATP y cayó en tercera ronda de Wimbledon en categoria Junior. En lo que va del año ganó tres Futures: Indonesia F2, Indonesia F3, Japón F6.

Contando esto, parece una persona común y corriente,  y a pesar de que así sea, cuenta con una cualidad que afecta mucho: es sordo de nacimiento.

En una entrevista concedida a principios de año, el que fue su entrenador hasta hace poco, José Luis López expresó como hacía con su pupilo para explicarle las cosas: "Los métodos de trabajo que utilizo son los mismos que para otros jugadores que he llevado, pero sí que es verdad que has de hacer un planteamiento desde el punto de vista de que no te oye, con lo que siempre digo que el esfuerzo lo has de hacer tú para que él te entienda y no al revés, comentó. Utilizo estadísticas que le saco de los partidos, grabaciones de vídeo de los partidos y entrenamientos. Luego comparto todo con él y le enseño, mediante un iPad, cómo se deberían poner en práctica las jugadas, qué golpe es mejor, comparaciones con jugadores 'top'".

Sobre como se comunicaba con el jugador el ex entrenador contó en una entrevista con la revista Elite Sports una divertida anécdota: "Lo primero que pensé fue que sería una gran responsabilidad poder entrenar a un chico que tiene un nivel muy alto y no me puede oír, a la vez que un halago por poder ser su entrenador. Me informé de cómo poder hablar con él, estudié varias semanas el símbolo de los sordos Y para mi gran sorpresa ¡No sabía el lenguaje de sordos!", expresó."Nos entendimos a la primera enseñándole las claves sobre los métodos y porque él sabe leer los labios".

Tal y como dijo el propio jugador, al ser sordo, a veces no escucha los fallos de los jueces de linea y sigue jugando los puntos normalmente, aunque al jugador no parece molestarle demasiado.

Veremos si en los próximos años conoceremos más de este jugador y si pudo triunfar a pesar de sus dificultades.









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