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Foto: Getty Images |
Rafael Nadal logró hacer historia estas últimas dos semanas. El fin de semana pasado, conquistó por décima vez el ATP Masters 1000 de Montecarlo al vencer a Albert Ramos-Viñolas y ayer, realizó lo mismo pero en el ATP 500 de Barcelona al vencer a Dominic Thiem y nuevamente lograr el décimo Conde de Godó.
Volviendo a tener un gran comienzo en esta gira de polvo de ladrillo, Rafael Nadal parece aquel jugador al que todos no querían enfrentar en su superficie predilecta. Más allá que en los últimos años Novak Djokovic y Andy Murray pudieron ganarle en el patio de su casa, la versión 2017 del español promete mucho.
La semana pasada el mallorquín venció a Albert Ramos-Viñolas para ganar por décima vez el título de Montecarlo. Se convirtió en el primer jugador en la historia del tenis en ganar 10 veces el mismo torneo y si eso no le alcanzó, Nadal volvió a repetir la hazaña en su país.
Ayer Nadal venció a Dominic Thiem (9°) por un cómodo 6-4 y 6-1 que si bien no lo mueve en el ranking, lo dejó a 390 puntos de Roger Federer (4°), que no volverá a jugar hasta Roland Garros y teniendo en cuenta que se vienen los Masters 1000 de Madrid y Roma, el español podría trepar en el ranking si mantiene su gran nivel.
Thiem por su parte quedó a tan solo 30 puntos de Marin Cilic (8°) en el ranking ATP y si sigue con el nivel, sería una seria amenaza para los otros jugadores.
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